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The story goes...

miércoles, 2 de mayo de 2012

Verdad

Me resulta increíble, irreal y por momentos incomprensible. A veces, veo una gota deslizarse por mis ojos y siento dolor en el modo de percibir al mundo. Es como si la gota de sensibilidad a flor de piel, se volviese contra la propia fuerza creadora. Reflexiono que las elecciones tienen que ver con nuestra responsabilidad pero a veces algunas posiciones se repiten en forma circular. Hablar con el corazón es una práctica -que en pocas personas conocí- .
Hoy en día estoy segura de que el hecho de dejar las vestimentas de lado nos vuelve más humanos y con más piel. Por supuesto, que existen situaciones en las que siento que las explosiones van de la mano del cuerpo. Sin embargo, en ellas me desconozco por completo, y creo que eso puede explicarse en el hecho de haber vivido varios meses en invierno. Un invierno diferente, tal vez, del vivero interior.
El recuerdo es con dolor y sangre, no hace falta que me la pintes en cuadros.

domingo, 29 de abril de 2012

Circe


En cada vivencia, en cada rincón de recuerdos, estaban presentes descripciones, algunas más o menos vivaces. El recuerdo de lo que fue, marcando continuamente el presente, dejando huellas que instauraban el color de su ser. Una chica tan pálida, tan gris, tan polaca, tan metal, presente en oscuridades y entretejidos que cubrían un verdadero dolor. La gran estructura, la habría marcado, la muerte estaba demasiado viva en ella y la oscuridad la había alumbrado. Demasiadas encrucijadas, permanentes crucigramas en el texto, oscuridades y manos sucias, más y más tierra formaba una gruesa capa de polvo. 
El olvido y el recuerdo eran dualidades que se cruzaban. Se repetía la misma historia de amor, una y otra vez. "Demasiados nombres para la misma pared", decían algunos. Vestida de luto solía caminar por sobre su maraña, visitando novios y cocinando sabores. El rol que desempañaba en las familias, su familia, la ruborización hecha persona, el componente social en su más alto pedestal, encubriendo de una forma u otra la verdadera realidad. 
Ella imponía distancia, derramaba arrogancia. La oscuridad era la que dejaba ver las visitas de aquellos queridos, los colores mas fríos reinaban en su esplendor. La desconfianza y el "que dirán", gobernaban la escena. El tiempo y los enigmas eran los principales protagonistas. En esta escena cobraron paisaje los animales disfrazados, aquellas miradas perdidas, los enigmas y disfraces que inspiraron lo más profundo. Los sabores, las conquistas, los bombones tejían redes, éste era su telar. Mientras del otro era asociar, era armar, desarmar un rompecabezas, partes en las cuales poder establecer una significación, una realidad para él. 
Él concebía un supuesto olvido de los muertos, alguna esperanza de amor, alguna pizca de placer y por sobre todo lo rebalsaba la desconfianza. El amor, la servidumbre, el acompañamiento, el olvidar el pasado viviendo el presente. No podía sentirse un único chico entre mil, el deseo de ser especial se encontraba a flor de piel. El afecto, la ilusión, las infamias, el deseo de reconstruirla, de unir sus partes. El la contemplaba y ella le permitía ubicarse en un lugar privilegiado, ya que a él le encantaba escuchar las descargas afectivas musicales de ella frente al piano al emprender el camino de la melodía. La confianza y la desconfianza, la dualidad funcionaba poniendo en marcha aquella situación. Ella le ofrecía aquello tan preciado, aquello dulce, especial, suplicándole un lugar privilegiado. Él llegó a comprende el deseo ferviente que ella sentía, aquel deseo de probar sus propios bombones. Silencios y sonidos se dejaban percibir. Sin embargo, un cambio de rumbo, un paréntesis se abría y cerraba rápidamente, faltaba una vuelta de tuerca. Entre llantos y sollozos, él ya no quería asumir el rol, no quería probar más, solo quería hacerla callar. Callar a su vez el recuerdo y el amor, el desamor, la dicha, la tristeza, la soledad, a toda ella.

leopardos se sienten..


dos genios.


Cuando te atraviesa la música, penetra en tus oídos, inspira melodías que hacen vibrar tus sentidos. El agua corre y rebotan las ondas como luces en el cielo. Con el frío, caen estrellas de un cielo azul y entonces la música actúa como una señal luminosa. En ese estado, que puedo llamar de  "ser-siendo",  la canción, es quien te lleva de la mano a otro lugar. Atempera lo inmediato y hace que sientas esa luz brillante de un músico, que te lleva con él, hoy y siempre dentro de su música.

Alma de diamante.

Hielo Ardiente! Nombres y títulos son los primeros en aparecer cuando se abre el telón. La simple elegancia de cada uno de ellos hace que se den el lugar que parecen tener merecido. El resto que hay, entre lo real y la imaginación, hace perder la conciencia a cualquier espectador. En cada función se hacen presente nuevas sensaciones e imágenes y todo cobra un color diferente. A mitad de fila, todo comienza a tener un cuerpo, más pesado y consistente, es allí cuando se agrupan diferentes letras para dar sentido al papel. A través del espejo es más simple ver que es lo correcto, las correcciones se imprimen rápidamente sobre cada palabra. La energía es fundamental, encerrarse en el asunto para poder captar la claridad del lente al maximizar su visión. Llegando al final, se desanuda lo que alguna vez estuvo peinado y lo demás se lo deja libre, al viento para que fluya en su curso.

Un vidrio, del otro lado.

Leí aquel poema indebido, que dejó un silencio lleno y mi papel en blanco. Grandes desconciertos: de lo que fué, de lo que es y de lo que será. Infinitas preguntas sacuden mi mente, respuestas que cada vez.... me visitan menos.
Te decía-entonces... no quiero repetirlo- pero leí, aquella poesía indebida que dejó un lleno vacio y mi papel en blanco. "Un vidrio del otro lado"- decía mi voz interior. Creo que es el termino justo, si ustedes me piden una definición. La misma se escapa de las palabras, tal vez sea una metonimiaLo que consigo afirmar, es que fue una voz y desde el profundo interior.





almendra


Lo único que permanece es el movimiento, mirar el reflejo de las hojas, un recomendable trabajo y llamar a las cosas por su nombre. Cuando las palabras muerden la lengua, uno sigue intentando tener una chance. A veces es mejor no atrapar a gato sin ratón, tu indiferencia es como un león. Pero es la última fuga de esperanzas, en mi opinión soy muy lenta para perder.



Una nueva estación

Más allá de una generalización o de una frase desvirtuada aludiendo al crecimiento de las flores o la especie vegetal, podemos hacer un recorte ilustrativo de un comenzar. 
Se inicia una hoja, se inscriben marcas sobre un papel, se lo pinta y se le habla. 
Entonces, recordamos que en la nervadura de la hoja se encuentra la estructura de la planta.
En una elección, dejamos cosas por fuera y tomamos alguna ruta posible para poder viajar y empezar algo nuevo. Arribamos a un punto no tan blanco de descanso, que es un nuevo atajo. Al fin! nos permitimos liberar la mente y refrescar el cofre...